Por Paloma Pascual
Última actualización 30/01/2012@20:36:35 GMT+1
La difícil situación que atraviesa Grupo Dinosol, en manos de un pool de entidades bancarias y pendiente de una posible y controvertida venta, sigue sin solución. Por el momento, se toman medidas paliativas, como la reestructuración de la compañía, que supondría la segregación de su actividad en las regiones españolas donde opera. Una estrategia, que deberá esperar a la aprobación de la próxima junta general extraordinaria, que se celebrará el 21 de febrero.
La cesión se realizaría a favor de la sociedad unipersonal Casment Investment y de acuerdo a los principios de la ley. Sin embargo, el consejero delegado de la compañía, Javier Pérez de Leza, sostiene que “la segregación no significa que haya un acuerdo cerrado”, lo que descarta una venta inminente, aunque deja abierta la puerta a esa posibilidad. En todo caso, Dinosol debe tomar una decisión cuanto antes, si quiere asegurar su viabilidad y mantener los puestos de trabajo.
La empresa, que centra sus objetivos en el plan 2011-2015, se ha comprometido con los sindicatos a informar puntualmente de los acontecimientos que se vayan produciendo. Mientras tanto, los trabajadores, a través de sus representantes sindicales, han decidido crear una plataforma para abordar las medidas del futuro convenio.
La empresa, que centra sus objetivos en el plan 2011-2015, se ha comprometido con los sindicatos a informar puntualmente de los acontecimientos que se vayan produciendo. Mientras tanto, los trabajadores, a través de sus representantes sindicales, han decidido crear una plataforma para abordar las medidas del futuro convenio.
Dinosol, en manos de grupo de 24 bancos, encabezado por Bankia, Societé Generale, Lloyds, Alcentra, Indicus y Prudential, que de forma conjunta reúnen el 60% del capital, afronta un futuro incierto.
La oferta de la cadena lituana Maxima, perfilada como opción preferente, parece la mejor solución. Dinosol encargó al banco de inversión Rothschild dirigir la operación de venta, con un precio de entre 150 y 250 millones de euros.
Con 450 puntos de venta (bajo las enseñas Supersol, Cashdiplo e Hiperdino), repartidos entre Madrid, Castilla-La Mancha, Extremadura, Andalucía y Canarias, Dinosol colgó el cartel de venta a la vuelta del verano .La salida de Permira de su accionariado en abril de 2011, le permitió refinanciar su deuda de reduciéndola de 400 millones a 100 millones de euros.
VER ENLACE
